El afecto es el vínculo más importante para favorecer la unión en la familia y se puede manifestar de diversas maneras, ofreciendo seguridad y protección o simplemente gozando de la compañía familiar. El amor y la comunicación son la base de cualquier relación familiar, por ello es importante desarrollar una sana convivencia.
La comunicación es vital para fortalecer los vínculos afectivos de la familia. Traten de comer o cenar la mayor parte de la semana juntos. En caso de tener agendas complicadas, programen un día para comer juntos.
Compartan actividades, juegos y aficiones. Si tus hijos manifiestan interés por alguna actividad artística, deportiva o intelectual, busquen la manera de darles apoyo y estímulo para que la practiquen.
Dediquen un día a la semana a hacer algo juntos como visitar a los abuelos, dar un paseo, caminar, jugar al aire libre, etc.
Aprovechen las oportunidades de asistir a actividades culturales. Pueden ir a librerías, museos, casas de cultura, espectáculos al aire libre, etc. Este tipo de actividad servirá para un conocimiento extra y la mejora del vínculo familiar.
Pueden jugar algunos de los juegos que ustedes conocen como resorte, cuerda, a las escondidas o juegos de mesa como damas chinas, dominó, rompecabezas o juegos de memoria.
Una actividad interesante es apreciar la naturaleza y sus distintas manifestaciones, pueden ir a caminar a parques o bosques, mirando el cielo con ellos y observando los cambios de las nubes y de las estrellas, del follaje y de las flores.
Es importante aprovechar, valorar y disfrutar cada actividad que puedas realizar en familia porque son irrepetibles y en ellas puedes aprovechar para enseñarles e inculcarles el verdadero significado de la familia y los valores a tus hijos.